¿Qué es el Adviento?


El Adviento es el comienzo del Año Litúrgico, empieza el domingo más próximo al 30 de noviembre y termina el 24 de diciembre. Son los cuatro domingos anteriores a la Navidad y forma una unidad con la Navidad y la Epifanía.

El término «Adviento» viene del latín adventus, que significa venida, llegada. El color usado en la liturgia de la Iglesia durante este tiempo es el morado. Con el Adviento comienza un nuevo año litúrgico en la Iglesia.

El sentido del Adviento es avivar en los creyentes la espera del Señor.

Se puede hablar de dos partes del Adviento:

Primera Parte

Desde el primer domingo al día 16 de diciembre, con marcado carácter escatológico, mirando a la venida del Señor al final de los tiempos;

Segunda Parte

Desde el 17 de diciembre al 24 de diciembre, es la llamada «Semana Santa» de la Navidad, y se orienta a preparar más explícitamente la venida de Jesucristo en las historia, la Navidad.

Las lecturas bíblicas de este tiempo de Adviento están tomadas sobre todo del profeta Isaías (primera lectura), también se recogen los pasajes más proféticos del Antiguo Testamento señalando la llegada del Mesías. Isaías, Juan Bautista y María de Nazaret son los modelos de creyentes que la Iglesias ofrece a los fieles para preparar la venida del Señor Jesús.

El domingo 1 de diciembre comenzará Adviento, un hermoso tiempo de preparación para la Navidad donde cada domingo se enciende una vela como signo de vigilia.

A continuación, presentamos cuatro cosas que todo cristiano debe saber sobre la característica Corona de Adviento.

1. Tiene un origen pagano

La Corona de Adviento tiene su origen en una tradición pagana europea que consistía en prender velas durante el invierno para pedirle al dios sol que regresara con su luz y calor.

Los primeros misioneros aprovecharon esta tradición para evangelizar a las personas y les enseñaron que debían aprovechar esta Corona de Adviento como medio para esperar a Cristo, celebrar su natividad y rogarle que infunda su luz en sus almas.

2. Su forma circular es signo del amor de Dios

El círculo es una figura geométrica que no tiene ni principio ni fin. La Corona de Adviento recuerda que Dios tampoco tiene principio ni fin, por lo que refleja su unidad y eternidad. Es señal del amor que se debe tener hacia el Señor y al prójimo, que debe renovarse constantemente y nunca detenerse.

3. Las ramas verdes representan al Cristo vivo

El color verde representa la esperanza y la vida. En la corona de adviento nos recuerda que Cristo está vivo entre nosotros y la vida de gracia, el crecimiento espiritual y la esperanza que debemos cultivar durante Adviento.

El anhelo más importante debe ser el llegar a una unión más estrecha con Dios, nuestro Padre, así como el árbol y sus ramas.

4. Las cuatro velas representan cada domingo de Adviento

Las cuatro velas de la Corona de Adviento se van prendiendo semana a semana, en los cuatro domingos de adviento y con una oración especial.

Las velas permiten reflexionar la oscuridad provocada por el pecado que ciega al hombre y lo aleja de Dios. Después de la primera caída del hombre, Dios fue dando poco a poco una esperanza de salvación que iluminó todo el universo, como las velas de la Corona.

Así como las tinieblas se disipan con cada vela que encendemos, los siglos se van iluminando cada vez más con la cercana llegada de Cristo al mundo.